REFORMA PENITENCIARIA EN EL URUGUAY: UNA MIRADA AL PROCESO DE DESPOLICIAMIENTO DEL SISTEMA CARCELARIO A DOCE AÑOS DE LA ERA PROGRESISTA

  • Ana Vigna Licenciada y Magíster en Sociología por la Universidad de la República, Uruguay (UdelaR), y Doctoranda en Sociología por la Udelar y la Universidade de Sao Paulo, Brasil. Es docente e investigadora del Departamento de Sociología de la Facultad de Ciencias Sociales, UdelaR.

Resumo

Al asumir el Frente Amplio su primer período de gobierno en el Uruguay en el año 2005, el novel Presidente de la República declaraba el estado de emergencia humanitaria en el sistema penitenciario. Y es que nuestras cárceles estaban caracterizadas por altísimos niveles de hacinamiento, ocio compulsivo, infraestructura en estado lamentable, y una institucionalidad penitenciaria netamente policial, entre otras. Años después, y no habiendo cambiado sustantivamente la situación, se da inicio a un proceso de reforma penitenciaria con el compromiso de todos los partidos políticos con representación parlamentaria. A pesar de los importantes cambios que se han venido llevando adelante a lo largo de este período, la situación continúa siendo preocupante: en 2017 Uruguay alcanza su tasa récord de encarcelamiento, con un altísimo porcentaje de presos sin condena y se observa también un número alarmante de muertes en prisión. Si bien existe un amplio grado de acuerdo respecto de que las cárceles deben salir de la órbita del Ministerio del Interior y que se debería dar un proceso de despoliciamiento del sistema, la fuerza policial continúa siendo mayoritaria a nivel del personal penitenciario, y la asignación del funcionariado al ámbito carcelario continúa utilizándose como “castigo”. A la luz de estos hechos, esta ponencia busca analizar las marchas y contramarchas ocurridas en el proceso de despoliciamiento del sistema penitenciario, a lo largo de estos doce años de gobierno progresista en el Uruguay.
Publicado
2017-06-20